Preocupados por el ambiente corporativo y los insistentes ataques a corporativos como Sony y el caso Wikileaks, el equipo de ESET Latinoamérica presenta un decálogo con los consejos más importantes para proteger la información.
La fuga de información es considerada como el problema principal para que las empresas tengan riesgos.
Estos son los principios básicos que las empresas deben considerar para una buena protección.
–Definirás una política de seguridad: Es el documento que rige toda la seguridad de la información en la compañía. Se recomienda que no sea muy extensa (ningún empleado podrá comprometerse con un documento excesivamente extenso), que sea realista (pedirle a los empleados cosas posibles para mantener la credibilidad) y que se les de valor. Es preferible, además, que las mismas sean entregadas a los empleados por los altos cargos o por el departamento de Recursos Humanos, en lugar del soporte técnico de IT, para que le asignen mayor importancia.
–Utilizarás tecnologías de seguridad: Son la base de la seguridad de la información en la empresa. Una red que no cuente con protección antivirus, un firewall o una herramienta antispam estará demasiado expuesta como para cubrir la protección con otros controles. Según lo presentado en el ESET Security Report Latinoamérica, el 38% de las empresas de la región se infectaron con malware el último año.
–Educarás a tus usuarios: Los usuarios técnicos o del departamento de IT suelen ser omitidos en este tipo de iniciativas, como si estuviera comprobado que están menos expuestos a las amenazas informáticas. Según las estadísticas de ESET,
el 45% de los ataques informáticos detectados en la región utiliza técnicas de Ingeniería Social- es decir, que atentan contra el desconocimiento del usuario para infectarlo. Por ello, es fundamental que toda la empresa forme parte de los procesos de educación y capacitación.
–Controlarás el acceso físico a la información: La seguridad de la información no es un problema que deba abarcar sólo la información virtual, sino también los soportes físicos donde ésta es almacenada. ¿Dónde están los servidores? ¿Quién tiene acceso a éstos? Sin lugar a dudas, el acceso físico es fundamental. También deben ser considerados en este aspecto los datos impresos, el acceso físico a oficinas con información confidencial (el gerente, el contador, etc.) o el acceso a las impresoras.
–Actualizarás tu software: Las vulnerabilidades de software son la puerta de acceso a muchos ataques que atentan contra la organización. Según el informe sobre el estado del malware en Latinoamérica elaborado por ESET, el 41% de los dispositivos USB están infectados y el 17% del malware utilizan explotación de vulnerabilidades. Mantener tanto el sistema operativo como el resto de las aplicaciones con los últimos parches de seguridad, es una medida de seguridad indispensable.
–No utilizarás a IT como tu equipo de Seguridad Informática: Es uno de los errores más frecuentes, por lo que es importante recordar que la seguridad no es un problema meramente tecnológico. Debe existir un área cuyo único objetivo sea la seguridad de la información para que ésta no pueda ser relegada por otros objetivos asociados a la usabilidad, como por ejemplo la instalación y puesta a punto de determinado servicio, según las necesidades comerciales.
–No usarás usuarios administrativos: De esta forma, una intrusión al sistema estará limitada en cuánto al daño que pueda causar en el mismo.
–No invertirás dinero en seguridad sin un plan adecuado: La seguridad debe ser concebida para proteger la información y, por ende, el negocio. Hacer inversiones en seguridad sin medir el valor de la información que se está protegiendo y la probabilidad de pérdidas por incidentes puede derivar en dinero mal invertido o, básicamente, en dinero perdido.
–No terminarás un proyecto en seguridad: La seguridad debe ser concebida como un proceso continuo, no como un proyecto con inicio y fin. Es cierto que pequeñas implementaciones de los controles pueden necesitar de proyectos, pero la protección general de la información es una necesidad permanente del negocio que debe encontrarse en mejora continua.
–No subestimarás a la seguridad de la información: Entender el valor que asigna al negocio tener la información protegida es clave. Muchas empresas, especialmente las pequeñas y medianas, no pueden recuperarse de un incidente de gravedad contra la seguridad de la información.